Centros comerciales, ¿Amenaza u oportunidad?

Llevo tiempo oyendo hablar de la implantación de uno o varios centros comerciales en la isla de La Palma, hace poco se planteaba uno en Los Llanos de Aridane, otro en la zona aeroportuaria del nuevo aeropuerto de La Palma.
Cualquiera que mire un poco hacia detrás, se dará cuenta que las experiencias anteriores han fracasado, quizás por su concepción, formato poco adecuado, escaso atractivo u oferta con poco tirón, recordarán: Tagomago, Mabel, entre otros.
Hoy tenemos una magnifica instalación en la marina del puerto de S/C de La Palma, una edificación moderna, con gran atractivo, que no termina de arrancar, la ocupación no llega al 40% lo que hace que el proyecto peligre.
Por su ubicación es un sitio ideal para la restauración y el ocio, aunque existen franquicias de alto nivel instaladas, pero no son las locomotoras que se necesitan para animar a los empresarios a apostar por esta instalación y abrir o trasladar su negocio.
¿Es bueno que desde el punto de vista del inversor La Palma no sea atractiva para instalar una gran superficie, centro comercial o cualquier otro proyecto?.
Hemos pensado ha cerca de las consecuencias que puede acarrear desde el punto de vista económico y de imagen, que una instalación de este tipo fracase.
Las experiencias mas próximas las tenemos en Tenerife, donde se han instalado numerosos centros comerciales, lo que ha acarreado el cierre de muchos comercios minoristas y la destrucción de muchos puestos de trabajo, además del excedente de locales comerciales, que podemos ver por numerosas calles que antaño tenían una gran actividad y que ahora con las obras del tranvía y la instalación de las grandes superficies, tienen el letrero de se vende o alquila y presenta un paisaje desolador.
Pero uno de los mejores ejemplos de revitalización del comercio minorista lo tenemos en La Laguna, donde la Zona Comercial Urbana, con las obras de peatonalización ha plantado cara a las Grandes Superficies y es hoy un referente de toda Canarias.
Las Grandes Superficies, vendrán en tanto en cuanto La Palma suponga un atractivo para instalarse, eso no lo podemos evitar, ¿pero que debemos hacer?
Esperar a que se implanten, o prepararnos como La Laguna, donde su asociación a jugado un papel fundamental como motor para el desarrollo de la zona.
Sólo si estamos bien posicionados, aprovechamos todas las oportunidades que se nos presentan para modernizar, transformar y cambiar nuestros negocios, y además nos unimos y aprovechamos la Asociación para seguir impulsando el desarrollo de la zona, estaremos en condiciones de afrontar los nuevos retos del futuro.
Si no, tendremos que ir pensando si es mejor estar dentro o fuera del Centro Comercial.
Afortunadamente, el comercio de proximidad, las Zonas Comerciales Abiertas, son un formato altamente valorado y cada vez mas el consumidor demanda espacios abiertos, donde poder comprar, descansar o divertirse.
Si miramos al futuro con optimismo, somos capaces de ver la futura playa como una oportunidad para repensar nuestros negocios, la peatonalización como una fortaleza y el potencial que tenemos como Zona Comercial, estaremos en mejor posicionados.
La Asociación ahora, y luego cualquier otro modelo de gestión de la ZCA es fundamental para salir adelante, súmate a nuestro proyecto, juntos podemos.